Publicado: 10 julio 2017. Textos: María A.R. Vicepresidenta SAA/AAE. Datos: The Minor Planet Center. NASA. NEODyS-2. ESA.
Los “Objetos Cercanos a la Tierra” son los asteroides, cometas y planetas menores con una distancia del perihelio inferior a 1,3 ua*. En astronomía, se engloban en el término NEO, acrónimo en inglés de Near Earth Objets.
(*La Unión Astronómica Internacional define una unidad astronómica (ua) como la distancia media de la Tierra al Sol: 150 millones de km. La abreviatura se escribe en minúsculas: “UA” es incorrecto.)
La gran mayoría de los NEO-s son asteroides, conocidos como “Asteroides Cercanos a la Tierra” (Near Earth Asteroids, en inglés). Los NEA-s, a su vez, se dividen en varios grupos según parámetros orbitales: Atira, Atón, Apolo y Amor, y en PHA-s los “Asteroides Potencialmente Peligrosos” (Potencially Hazardous Asteroids): pueden estar a 0,05 au de la Tierra (a 7,5 millones de km.) y ser mayores de 150 metros. Cuando hablamos de PHA-s siempre nos acordamos de la extinción de los dinosaurios y de la película “Armaggedon” (Micheal Bay, 1998) donde los perforadores de Harry Stamper salvan la Tierra del impacto de un gigantesco asteroide haciéndolo explotar y creando una romántica lluvia de estrellas, y otras catástrofes cósmicas de ciencia-ficción.
Representación artística que representa el Sistema Solar y la región del Cinturón de Asteroides entre las órbitas de Júpiter y Marte. En el cinturón orbitan los mayores asteroides conocidos, siendo los más grandes Ceres, Palas, Vesta, Hygiea, Interamnia, Europa, Davida, Sylvia, Cibeles y Eunomia, superando todos los 260 km de diámetro. Crédito imagen: NASA.gov.edu.
La importancia científica de los asteroides y de los cometas, reside en que el análisis de su composición puede aportar pruebas del origen del Sistema Solar, porque son el material sobrante de los “bloques” empleados en la construcción de nuestro sistema planetario. Los elementos químicos que los forman pueden contener muchas pistas para resolver la formación de nuestro lugar en la Galaxia, hace 4.600 millones de años y responder, además, a la gran pregunta: cuál es el origen de la vida en la Tierra.
¿Quién controla los NEO-s? El Centro de Planetas Menores (The Minor Planet Center. MPC) es la única institución mundial encargada del estudio y seguimiento de los asteroides y cometas y satélites externos irregulares de los principales planetas.
El MPC identifica, comprueba y calcula las órbitas de los NEO-s y anuncia nuevos descubrimientos. Divulga todos los datos orbitales físicos y fotométricos, y actúa como un archivo público poniendo a disposición de la comunidad científica todos los datos recopilados.
Estos datos son continuamente actualizados y en su web podemos consultar, por ejemplo, el número de NEO-s descubiertos, el Catálogo de las Órbitas de los Objetos Registrados (MPCORB) y muchos otros recursos y software para los buscadores de estos cuerpos celestes.
El MPC opera en el Smithsonian Astrophysical Observatory del Centro de Astrofísica de Harvard y depende de la Unión Astronómica Internacional (UAI/IAU).
Todos los fondos operativos del MPC provienen de una subvención del “Programa de Observaciones NEO” (Near-Earth Object Observations) de la NASA, programa que engloba también al “Centro de Estudios NEO” del Laboratorio de Propulsión (JPL Jet Propulsion Laboratory) al telescopio Catalina Sky Survey y a las misiones NEOWISE, Pan-STARSS, etc. y que, a su vez, también están implicados con la “Oficina de Defensa Planetaria” organismo de la NASA creado en 11 enero de 2016 para coordinar instituciones, gobiernos, universidades y astrónomos pro-am, para controlar los asteroides que pudieran impactar contra la Tierra.
Organigrama del “Programa de Observaciones NEO-S” englobado en la “Oficina de Defensa Planetaria”. Crédito imagen: NASA.gov/planetarydefense.
Hasta ahora, hay catalogados, contados y posicionados 753.637 asteroides, cometas y planetas menores, cifra esta que dentro de dos o tres días quedará anticuada. El MPC no puede seguir y controlar a todos los millones de trocitos de roca y hielo que deambulan por nuestro Sistema Solar: la aportación de los astrónomos pro-am es fundamental para seguir las trayectorias de estos objetos celestes.
El MPC da la oportunidad de convertirse en “observador autorizado” de NEO-s a quien desee colaborar en su seguimiento y cálculo orbital y adentrarse en el singular y sorprendente mundo de las infinitas rocas del Sistema Solar.
Tras “aprobar el examen” y comprobar la exactitud de unas mediciones astrométricas enviadas a su web, el Minor Planet Center asignará un código intransferible a estos observatorios para que sigan colaborando oficialmente en la búsqueda, estudio y seguimiento de asteroides y cometas.
Una vez definido el organigrama y la relevancia del seguimiento de NEO-s en la astronomía mundial, podemos regresar a nuestro pequeño y conocido espacio pro-am: En el pasado XXII Congreso Estatal de Astronomía de Pamplona se dedicó un homenaje al gran cazador de asteroides Josep Mª Bosch. El astrónomo catalán ha posicionado 375 objetos y ha descubierto el asteroide del tipo Apolo 2009 ST19, la roca más grande que se acerca a la Tierra; está tan entregado a sus descubrimientos, que confesó: “No miro por un ocular desde hace años, solo las pantallas” y admitió la dificultad que supone “aprobar el examen” del MPC.
Bosch sigue los pedruscos espaciales y cuando descubre un nuevo asteroide y es certificado por el MPC “La Cabalgata de las Walkirias” suena por el Observatorio Astronómico de Santa María de Montmagastrell MPC B74 en Tárrega. Bosch tiene una gran ventaja: una ordenanza municipal sobre contaminación lumínica le permite apagar varias farolas del alumbrado público cuando realiza observaciones y también… ¡el foco de la iglesia!
En la SAA/AAE también tenemos un buscador de NEO-s: las mediciones realizadas en el año 2007 por nuestro compañero Luis Etxazarra obtuvieron el reconocimiento del Minor Planet Center. Su estudio consistió en el seguimiento orbital de los asteroides (542) Sussana, (456) Abnoba y (484) Phisttburgia localizados en el cinturón principal de asteroides entre las órbitas de los planetas Marte y Júpiter.
Así fue el plan de observación para posicionar asteroides y demás materiales sobrantes empleados en la construcción de nuestro Sistema Solar. Cámara CCD. Telescopio Meade 300, software de astrometría y táper de macarrones. Fotografía: Luis Etxazarra. SAA/AAE.
Mediante astrofotografía y un software de astrometría determinó qué objetos eran asteroides y cuáles estrellas; calculó la posición, determinó la órbita de los tres asteroides y envió los resultados de sus observaciones al MPC.
Tabla de observaciones para (542) Susanna: fecha, ascensión recta y declinación, magnitud, localización de observatorio y referencia. Ref.: MPC.net.
El MPC verificó y aprobó las posiciones orbitales enviadas por Luis, y en 10 de julio de 2007 la designación fue oficial: Desde entonces la denominación de este pequeño espacio astronómico es Observatorio Iturrieta código MPC J44. Sus coordenadas son 42º41´42”N 2º20´36”W.
El 10 de julio de 2017, se han cumplido 10 años de un trabajo que supuso el reconocimiento científico para la SAA/AAE. Y sugiere atronar el silencio de la noche (para quien este texto escribe) con la contundencia del trash metal: la maravillosa “Orion” de Metallica…
Iturrieta J44 es el primer y único observatorio en Álava con el reconocimiento de la Unión Astronómica Internacional por sus observaciones científicas. La lista de observatorios puede verse en la web del Minor Planet Center y en el sitio NEODyS de información de objetos cercanos a la Tierra creado por la Agencia Espacial Europea (ESA).
Iturrieta J44 entre el J43 Oukaimeden Observatory de Marrakech (MOSS) y el Observatorio J45 de Montaña Cabreja, en Gran Canaria. Esta tabla contiene los datos básicos del seguimiento de asteroides NEOS realizado por Luis Etxazarra en el año 2007 con el telescopio Meade 300mm desde Iturrieta (Álava): Código designado por el MPC, nº de observaciones, nº de objetos NEO observados, nº de noches, magnitud de los asteroides, país y nombre del Observatorio. Ref.: IUA. Minor Planet Center. NEODyS-2 (ESA).
“Asteroides con la impronta de la SAA. La asociación recibe el reconocimiento científico”. La prensa publicó un reportaje y entrevistó a Luis Etxazarra. Coincidía la noticia con un hecho histórico para Vitoria-Gasteiz: el Eclipse Total de Sol de 18 julio de 1860. Llegó a nuestra ciudad una expedición de astrónomos para registrar el evento. El lugar está señalado por “El mojón de los astrónomos”. Ref.: Diario de Noticias de Álava. 18 julio 2007.
Mirando más allá de Orión viendo brillar los Rayos-C cerca de la puerta de Tannhäuser. Desde aquel mes de julio de 2007, el perfil astronómico de nuestro lugar de observación ha mejorado mucho; sin embargo, ha empeorado la calidad del cielo nocturno debido a un preocupante incremento de la contaminación lumínica. Foto: Observatorio Iturrieta MPC J44. Luis Etxazarra. SAA/AAE.
Un año después de obtener el código MPC, comenzamos a planificar la construcción de una estructura para evitar el montaje y desmontaje del telescopio Meade Schmidt-Cassegrain 300mm, salvar la contaminación lumínica y continuar el trabajo científico. La compleja construcción de la caseta que alberga los equipos astronómicos y la sala de control, fue financiada con el fondo de las cuotas y con aportaciones económicas desinteresadas de los socios de la Sociedad Astronómica de Álava. “¿Cúpula metálica o techo corredizo? ¿Robotizado o manual?”
Cómo logramos construir la estructura del observatorio supone escribir un capítulo aparte.